Aceites: ¿Cuál será el mejor?
La fantasía es un ingrediente necesario en la
vida. ~ Dr. Seuss
Un tema que nos tiene a todos curiosos y deseosos de
conocer más, es el de los aceites. En nuestro afán de conservar la buena salud, hemos
aprendido a consumir alimentos naturales y saludables, con los nutrientes necesarios para
mantenernos en óptimo estado, física, mental e incluso espiritualmente, y por
ello, muchas veces, cuando queremos hacer dieta, nos preguntamos si ¿debemos
dejar de consumir aceite y cocinarnos todo con agua? Otras veces nos
preguntamos, ¿cuál es el mejor tipo de aceite para freír, ó cuál es el más
recomendable para los aliños?, ¿cuántas veces se puedo usar?
Les cuento, la presencia del aceite en nuestra dieta data
de tiempos inmemoriales, y por ello, su uso, a veces, está basado en mitos y tradiciones, como la de untarlo sobre el cuerpo
como elemento curativo, cicatrizante, o incluso como protector de los malos
espíritus. Además de esto, lo usaban
para preparar sus alimentos, y a través del tiempo, fuimos aprendiendo a
conocer sus beneficios y lo necesario que es para una alimentación completa y
saludable, siempre y cuando se consuma adecuadamente.
Pero, ¿Qué son los aceites?
El Código Alimentario Peruano, define a los aceites alimentarios como aquellos
obtenidos a partir de semillas o de frutos oleaginosos, elaborados en ciertas
condiciones establecidas y que se mantienen líquidos a temperatura ambiente. Las investigaciones más recientes nos
demuestran que los aceites vegetales tienen una gran importancia en la
alimentación, ya que actúan en la fijación del calcio, caroteno, tiamina, lactosa
y junto con las vitaminas A, D, y K, contribuyen a proveer parcialmente a las
necesidades de nuestra alimentación, tienen propiedades antioxidantes, que nos
protegen del envejecimiento prematuro, y estimulan el sistema inmunológico, que
lucha contra las infecciones.
Los mejores aceites para nuestra salud son
los de oliva, canola, girasol y maíz. Estos contienen grasas insaturadas, o
“grasas buenas” y ayudan a reducir los niveles de colesterol en la sangre, y también,
mejoran la salud de nuestro corazón y arterias. La mejor forma de aprovecharlos es en
el aderezo de ensaladas, vegetales cocidos, para asar y cocinar. Lo más importante
es tener presente que el secreto fundamental está en la cantidad que usamos
para obtener los beneficios adecuados en nuestra salud, pues todos aportan la misma
cantidad de calorías, (incluso el de oliva): una cucharada tamaño té de aceite,
(unos 5 gramos) aporta 45 calorías.
Siempre debemos estar en alerta cuando cocinemos con
aceites que no toleran bien las altas
temperaturas ya que si se calientan demasiado, generan humo y empiezan a
descomponerse, perdiendo sus propiedades y creando sustancias tóxicas, nocivas
para nuestro organismo. Para las frituras debemos preferir los aceites más
resistentes al calor como el de maíz, girasol o canola.
En la próxima entrada, les contaré más sobre las
propiedades que tiene cada aceite en especial y sus usos; además incluiré unos
“tips” sencillísimos para poder aprovechar mejor los aceites en nuestra alimentación,
y así mantenernos saludables en el cuerpo, mente y alma.
Cariños,
Cheva Geller Sifnugel
Nutritherapy Solutions
Hola Cheva, lindo tu articulo pero que pasa con el TBHQ, que le ponen a los aceites que usamos?? que yo sepa es un derivado de petroleo, es bueno consumir ese veneno??,el tema de los aceites es mucho más amplio y hasta dá miedo. Yo cambié mi aceite de freír, por manteca de palma, no tiene nutrientes, pero al menos no me intoxicaré, eso espero, el aceite de oliva, solo para ensaladas y el de coco para freír también, que según he estado investigando por mi salud, el aceite de coco es de lo mejorcito que hay para cocinar. Ojala pudieras informarnos más acerca de estas sustancias, que le meten a los aceites de cocina y como nos afecta a la salud.
ResponderBorraratentamente
karla
Querida Karla, el TBHQ, tal como tu mencionas, es la sigla utilizada para describir a la “butil hidroquinona terciaria”, que es un antioxidante que procede del petróleo y se relaciona con el butano. Por lo general, se usa como conservante industrial, cosmético y en varios alimentos pre envasados.
BorrarSu función es reducir la oxidación de los alimentos a los que se aplica con la finalidad de que no se rancien o se oxiden; además, ayuda a reducir la pérdida nutricional con el paso del tiempo.
Se combina con una amplia variedad de alimentos, con el límite más alto (1 mg / kg) permitidos para el pescado congelado y productos pesqueros. Su ventaja principal es mejorar la vida de almacenamiento.
Aunque suele ser catalogado como un "antioxidante", es importante darse cuenta de que es un producto químico sintético con propiedades antioxidants, pero no es un antioxidante natural.
Como un aditivo alimentario, la Administración de alimentos y medicamentos (en inglés, Food and Drug Administration o FDA) permite que el TBHQ compense no más del 0,02 por ciento del total de los aceites en un alimento. Consumir hasta un gramo de TBHQ puede causar diferentes grados de toxicidad y hasta 5 gramos puede ser fatal.
Como ejemplo, te puedo decir que tendrías que ingerir 312,5 nuggets de pollo de McDonald''s (si contienen un 0,02 % de TBHQ) para consumir un solo gramo.
Personalmente, pienso que no te debes preocupar tanto por este aditivo, ya que está regulado por las máximas entidades de alimentación y drogas del mundo. Claro que siempre debemos cuidar la cantidad de aceite que vamos a consumir, porque todo exceso es malo para nuestra salud.
Gracias por haberme escrito y espero haberte ayudado a aclarar que el TBHQ consumido en cantidades adecuadas no es nocivo para la salud.
Cariños,
Cheva Sifnugel Geller
Nutritherapy Solutions